En los últimos cinco años, San Francisco de Macorís ha experimentado un proceso de transformación urbana sin precedentes, impulsado por iniciativas culturales y proyectos de infraestructura vial.
El Paseo de Colores, la rehabilitación del Parque Duarte y la expansión del sistema vial han cambiado la imagen de una ciudad que busca convertirse en referente regional.
Líderes comunitarios destacan la importancia de integrar a la ciudadanía en la planificación urbana, y advierten sobre el riesgo de gentrificación si no se establecen políticas de inclusión.
Organizaciones no gubernamentales trabajan para asegurar que el desarrollo no desplace a comunidades históricas y que se mantenga el equilibrio entre progreso y memoria.